El Concepto de Salud

La salud se ha definido como el estado de completo bienestar físico, mental, social, espiritual y no solamente la ausencia de enfermedad. Sin embargo, en el modelo operacional se define como un equilibrio dinámico entre la capacidad de crecimiento físico y psicosocial; la satisfacción percibida, la autoestima y el conocimiento alcanzado; la ejecución de los roles que mejoran y mantienen el bienestar del individuo, la familia y la comunidad. La interacción de estas tres áreas expone al individuo a su ambiente, lo cual puede resultar benéfico o nocivo para la salud.

El modelo epidemiológico transaccional de la salud se define el contexto y el contenido del encuentro clínico, complementando así el contexto guía para el equipo de la salud, integrando mente-cuerpo-espíritu con los factores biopsicosociales y culturales que determinan la capacidad de ajuste o adaptación a las influencias ambientales.

El enfoque de riesgo es una tecnología compleja de proceso que se basa en las siguientes premisas:

Las personas, familias y grupos tienen diferentes grados de probabilidad de desvío de su salud y bienestar. Por ello la necesidad de esfuerzos y recursos debe ser proporcional a sus necesidades.

Los factores de riesgo, su control y la promoción de factores protectores requieren del esfuerzo participativo de todos.

La probabilidad de un resultado no deseado aumenta cuando la persona, la familia o grupo son expuestos a uno o más factores de riesgo y su salud mejora cuando se desarrollan factores protectores.

La salud como resultado sobre un ente biopsicosocial, está referida a experiencias en el pasado y presente, determinando la salud o la enfermedad en épocas posteriores.

Este enfoque integral de la atención sobre la salud del individuo y su familia, trasciende el concepto de las patologías. Esto nos remite a la conceptualización y definición de lo que es la atención, los servicios de salud y la calidad de los mismos.

La Atención en Salud es el conjunto de decisiones y acciones para resolver las necesidades específicas de salud y la Calidad de la Atención, se entiende como la presencia de atributos que se debe tener el proceso individual de atención para lograr el máximo beneficio en la salud con los menores riesgos posibles para el paciente.

Por su parte los Servicios de Salud se definen como el conjunto de recursos físicos, tecnológicos y humanos, organizados para atender las necesidades individuales de salud de una población objetivo. La Calidad del Servicio es considerada como el conjunto de atributos que debe tener el sistema de prestación de servicios para garantizar los resultados esperados de la atención en salud de la población y la satisfacción de los afiliados según sus expectativas y condiciones.

Partiendo de estas definiciones generales sobre la salud en forma integral, y considerando todas las dimensiones del ser humano, podemos aproximarnos a enfoques, estrategias y formas de intervención del proceso salud-enfermedad.

El enfoque de I Nivel de Atención

El enfoque puede ser muy valioso incorporándolo en un modelo de investigación operacional, epidemiológica y diagnostica, asociada con programas de Información, Educación y Comunicación, prevención continua, entrega de servicios de salud con énfasis en el nivel primario y atención complementaria en los diferentes niveles de complejidad.

Este es de particular importancia, puesto que recogiendo los conceptos anteriores, las acciones de promoción de la salud y prevención de la enfermedad tienden a tener influencia positiva en el individuo y familia.

En este contexto, la promoción y la prevención se replantea en términos de prevención primaria, anticipando la enfermedad; prevención secundaria, atendiendo oportunamente la patología cuando se presenta para minimizar sus complicaciones y prevención terciaria para llegar a la habilitación del enfermo, a través de programas sistemáticos y controlados.

Se requiere entonces hacer congruentes los contenidos, métodos y espacios con los programas de promoción de la salud y prevención de la enfermedad desde el primer nivel de atención y el afinamiento de los procesos de referencia a otros niveles, procurando una activa participación de los afiliados.

De igual forma, se requiere de unas condiciones de eficiencia y eficacia de los servicios de salud ambulatorios, partiendo de un conjunto de características que deben reunir los recursos disponibles para anticiparse y atender adecuadamente las necesidades de salud de la población.

El Modelo de Atención de Salud

En general, un modelo de atención en salud podría ser definido como la forma en que reconstruimos los fines y procesos para efectos de la atención de las necesidades y demandas en salud de la población afiliada, con el objetivo de obtener impactos positivos en la salud de las personas consideradas de manera individual y colectiva. El modelo de atención también se mueve en el contexto de las racionalidades culturales, políticas, económicas, tecnológicas, organizacionales, éticas y jurídico-normativas, según lo acuerden o impongan los actores que los articulan.